miércoles, 14 de julio de 2010
Educación a distancia, una alternativa
A los 17 mil espacios con que cuenta el sistema tecnológico para incorporar a los bechilleres que no han tenido cupo en la Universidad Veracruzana, habrá que agregar la amplitud de espacios que hoy ofrece en Veracruz la modalidad de educación a distancia en línea.
En efecto, el Instituto Consorcio Clavijero, hoy convertido en organismo público descentralizado, ha incursionado en un modelo que pocas instituciones del mundo han podido instrumentar, en parte porque sus alcances son más bien de índole comercial y también porque aún las públicas, sobre todo en países desarrollados, están contando con que los aspirantes a estudiar en sus programas son mayores de edad, ya incorporados en el mercado laboral y con acceso a equipo de cómputo e internet.
El caso de Veracruz, si nos apegamos a sus características económicas y de acceso tecnológico, es diferente: para que una iniciativa innovadora como la de Clavijero fructifique, no sólo debe bregar para convencer a la población de que la educación a distancia es de calidad y puede formar a los nuevos profesionistas en las habilidades y destrezas que demanda el actual mundo laboral. También debe crear las condiciones para que miles de jóvenes tengan acceso a internet aún cuando no tengan equipo de cómputo propio.
Si imaginamos la oferta académica en línea de instituciones como el Tec de Monterrey, nos daremos cuenta de que su nicho de mercado es el de ingresos medios y altos, que tienen resuelto (en casa y oficina) el problema del acceso a internet.
No de otra manera podemos calibrar el enorme esfuerzo que ha hecho la administración pública estatal, a través de la SEV, para equipar 300 Aulas Clavijero en todo el estado, fundamentalmente con un programa que busca atender la demanda ahí donde se genera, “La universidad en tu prepa”, que permitirá a partir de este ciclo que los egresados de un bachillerato general, un colegio de bachilleres, un conalep, un telebachillerato o un Cecytev, se incorpore a la educación superior sin necesidad de salir de sus propias comunidades.
Al menos 20 equipos de cómputo y dos servidores conectados a internet permitirán a unos 50 jóvenes por aula incorporarse a carreras como administración tributaria, comercio internacional, gestión ambiental, gestión de educación y capacitación, gestión empresarial turística, tecnologías de información aplicadas a la administración o ingeniería en sistemas computacionales.
Con un diseño en sus programas que garantiza una educación flexible en cuatro períodos trimestrales al año, un modelo curricular escalonado que permite la salida intermedia para que, en dos años, el estudiante obtenga el título de Técnico Superior Universitario, o bien continuar estudiando y alcanzar el grado de licenciatura, el Instituto Consorcio Clavijero está en posibilidades de admitir a por lo menos 15 mil estudiantes.
Los tiempos de educar en línea, por venir
Por desgracia, todavía no hay una cultura que permita la inscripción masiva en programas en línea, si bien -como en los modelos de educación a distancia ya consolidados (secundaria y bachillerato por televisión)-, cuando agarre fuerza realmente emprenderá un vuelo sin precedentes ni retorno.
Julieta Palma Anda, directora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) para México, Centroamérica y el Caribe, considera que México tardará alrededor de 15 años en integrar la tecnología como herramienta del aprendizaje, porque todavía hay renuencia al cambio de método de enseñanza debido a la brecha generacional que impera en el país, y esta reticencia sólo retrasa aún más el desarrollo de la economía.
En entrevista publicada por El Universal esta semana, Palma Anda señala que a la educación en línea se le percibe como “de segunda”, porque las universidades convencionales tienen temor de compartir sus contenidos en la red.
Cuando se le cuestiona sobre las diferencias entre los cursos presenciales y los virtuales, Palma Anda contesta:
“Son diferentes métodos de enseñanza-aprendizaje. Cuando estás presente tienes la interacción directa de los demás estudiantes y profesores, puedes ver su comunicación no verbal, hay debates sobre un tema que se da en un tiempo determinado, puedes replantear tus opiniones en directo, aunque la comunicación no es a largo plazo y no hay oportunidad para la reflexión. En cambio, con la educación en línea hay que desarrollar otras habilidades como el lenguaje escrito; sí hay tiempo de reflexionar y estructurar metodológicamente el conocimiento, pues uno es responsable de lo que se aprende”.
Dichas ventajas tienen que ver, además, con las habilidades que están demandando las nuevas empresas, lo que constituye una ventaja adicional.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario